Zona de trabajo que busca músicos

martes, 12 de abril de 2011

Voto Viciado

Y pasaron las elecciones, y estoy ad portas del debut de mi banda que ha tenido mas sobresaltos que una película de Wes Craven. Mañana tocaremos superando el dolor de la muerte del abuelo de Alonso ocurrido hace un par de días. Es una decisón difícil, pero creo que él lo habría querido así. Era músico como nosotros, y del mismo modo seguramente habría seguido adelante con el espectáculo. Como lo hacen los buenos. Así que nuestra prueba de hoy es doble: tocar bien y con el ánimo en alto.

Acabo de llegar del velorio y enciendo la TV para conectarme con lo que está pasando en estos momentos post electorales. Y veo una entrevista de Prensa Libre en el canal 4. Rosa María Palacios entrevistando a Carlos Tapia del Partido Nacionalista. Unos antecedentes para contextualizar. Conozco la carrera política de Carlos desde mi época universitaria. Supe que había sido militante de Vanguardia Revolucionaria y que había tenido actividad guerrillera. A pesar de ello, se había ganado mi respeto debido a que sus posiciones eran mesuradas e inteligentes. Siendo él un miembro de la Izquierda Unida (con posterior militancia en el PUM) postuló para diputado y ganó. Yo voté por el. Años después fue uno de los miembros de la Comisión de la Verdad junto con Humberto Lay la misma que fue presidida por el ex rector de la PUC Salomón Lerner. Su labor me pareció respetable y encomiable por su exhaustivo conocimiento del fenómeno senderista.

De repente al año o dos del cese de esta Comisión lo encuentro como vocero del Partido Nacionalista. ¿Qué pasó? La búsqueda pragmática del poder. Ollanta era la única figura dentro del espectro izquierdo de la política que se alzó con reales posibilidades de poder. Me dije, decisión difícil, conciliar ideales de izquierda con un nacionalismo autoritario y trasnochado es una estrategia maquiavélica pero quizá necesaria. Le dí el beneficio de la duda.

Hasta hoy.

Yo dudaba en viciar mi voto, estaba comenzando a ser mas benevolente con Ollanta. De repente, me dije, es necesario una patada al cerebro de los peruanos para que de una vez nuestra idiosincracia tan estamental se sacudiera y comenzara la tan necesaria redistribución de ingresos que la economía de nuestros compatriotas reclama. Que me importa los números azules en macro cuando veo como aún la gente vive en ciudades construidas sobre desiertos o rellenos sanitarios. Pero Carlos Tapia me ha convencido que la decisión maquiavélica que tomó, fue nada mas que un peldaño en la mera lucha por el poder. Durante el programa de anoche con Rosa María Palacios, actuó de manera desaforada, atacando con argumentos maniqueos y eludiendo preguntas con lo que en lógica se conoce como "argumento del hombre de paja" (busca en Wikipedia, pe). ¿Dónde quedó la persona razonable con la que había tratado en los 80? ¿Dónde estuvo el ex comisionado de la verdad?

Si ese comportamiento, el callar a los gritos al interlocutor y eludir preguntas vitales va a ser la lógica demostrada por uno de los líderes del humalismo, entonces ya estamos advertidos. El consenso y la lógica no serán las virtudes del gobierno nacionalista. Me dicen que la entrevista con Martha Chávez tuvo un cariz similar. No lo se, no lo he visto. Pero conozco cuan obtusa es la señora en cuestión. Lo suficiente como para negar la veracidad del video Kouri-Montesinos insinuando que era una filamción trucada.

Me siento realmente perturbado y desilusionado. Carlos Tapia me ha quitado la única posibildad de no viciar mi voto. El beneficio de la duda que había estado dispuesto a ceder solo duró dos días. Hoy estoy convencido que el único imperativo categórico moral (me gusta Kant) que me queda en esta elección es viciar mi voto. Espero no ser el único.

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